Busque sobre Nefrología - Urología

lunes, 8 de octubre de 2012

Nils Alwall y Otros Avances

Nació en 1906 en Kristianstand, al Sur de Suecia. Allí estudió, para luego trabajar como farmacólogo y bioquímico cerca de Lund, donde finalmente se estableció y estableció una unidad de diálisis que aún hoy funciona.

Construyó él también un riñón con bobina vertical en 1942, que usó recién en 1946, sin mucho éxito con el primer paciente, que murió, pero logrando que sobreviva su segundo paciente, apoyado con entusiasmo por su profesor.

Pero donde quizás más se vio la influencia de este bioquímico es en los métodos de conexión vascular, donde no se veía un desarrollo similar al logrado con el riñón artificial y las técnicas de diálisis. Lo que hizo Alwall fue intentar unir la cánula de vidrio arterial con la venosa con un tubo de goma, ya que con el método que se utilizaba (la cánula de vidrio nombrada) las arterias y venas quedaban inutilizadas después de la sesión de diálisis. Pero los accesos del tubo se coagulaban. Sin embargo esta fue la base de la idea de shunt arteriovenoso, que a partir de esta idea se comenzó a desarrollar.

La primera solución que se encontró al problema del acceso, y con esta idea como base, fue la de utilizar tubos de un polímero, llamado PTFE, que se usaba como aislante de cables eléctricos, para la realización (previo moldeado, ya que eran tubos fijos) de shunts A-V. Este descubrimiento fue realizado por Belding Scribner y colegas, en Seattle, cuando un cirujano llamado Warren Wintershide tuvo en cuenta este material, ya que hacía tiempo que buscaban una solución al problema de los accesos. Con la ayuda de un ingeniero (Wayne Quinton) y a través de la Medical Instrumen Facility se realizaron los primeros shunts, utilizados con éxito en 1960 por el cirujano David Dillard.

Luego de este descubrimiento, el ingeniero Quinton intentó mejorar los shunts, buscando un material no tan rígido, y finalmente lo logró, fabricándolos con un compuesto llamado silicone rubber, mucho más flexibles que el material anterior, por lo que podía ser usado más fácilmente, y las arterias debían ser reemplazadas sólo cada seis o nueve meses.
 
Otros Avances Podemos, luego de ver los grandes cambios que se produjeron gracias a estos hombres, hablar de otros avances dentro de la hemodiálisis, como la creación de la Fístula A-V (FAV), planteada por médicos de Nueva York, entre los que se encontraba James Cimino, al que se le ocurrió en su época de estudiante de medicina por una serie de acontecimientos, la utilización de una fístula subcutánea previamente creada.

El mismo grupo que desarrolló el shunt de PTFE, inició le desarrollo en diferentes etapas de lo que era el tanque de diálisis, diseñando un sistema de bomba para mezclar líquido de diálisis y agua, que en un principio eran enormes, y luego se redujeron para terminar siendo usados en diálisis domiciliarias.

También el líquido de diálisis, hasta ese momento con la misma base que en el Siglo anterior, pasó a tener como base el acetato, y luego el bicarbonato.

En el desarrollo de la técnica de diálisis hemos visto que en un principio, debido a que los especialistas estaban recién conociendo la técnica, eran pocos los pacientes tratados con esta técnica, pero desde que ya se instaló como tratamiento para tratar enfermedades renales el crecimiento de los pacientes tratados ha sido enorme.

En Europa a mediados de los sesenta el número de pacientes tratados con hemodiálisis era de 160, mientras que en la década del ochenta eran en Europa 70831 (y en el mundo el número de pacientes era de 120000). Ya en los noventa eran más de 90000. En este mismo continente, los pacientes mayores de 65 años tratados con diálisis crecieron en los ochenta del 11% al 37%.

En Estados Unidos se ha incrementado el número de pacientes mayores de 65 años en un 300% desde 1984.

Esta técnica, desde sus inicios hasta hoy, ha crecido enormemente. Y como hemos visto, este crecimiento pudo lograrse gracias al esfuerzo de personas que pudieron sobreponerse a la incredulidad de los comienzos y a las dificultades técnicas.

Friedrich Gustav Jacob Henle (1809-1885)

Los años comprendidos entre 1848 y 1914 constituyen según Magnus Levy la "edad heroica de la medicina alemana". Los esfuerzos desarrollados por la llamada generación intermedia, constituida entre otros por Johannes Müller, Schönlein, Swann, y Henle, dio lugar a que la anatomía patológica, la fisiología y la microbiología alcanzaran un nivel espectacular y la clínica ganara en calidad y se atuviera a los postulados del laboratorio.Precisamente en ese contexto de "generación intermedia" es donde debemos situar la obra de Friedrich Gustav Jacob Henle.Si a Schwann se le atribuye la formulación de la teoría celular, a Henle se le relaciona con la aplicación de esa teoría a la anatomía microscópica, siendo el que publicó el primer tratado de histología.

Nació en Fürch, cerca de Nurember, el año 1809. Estudió en las Universidades de Heidelberg y Bonn. Se doctoró en 1832. En Berlín fue discípulo de Johannes Müller y mantuvo estrechas relaciones con M.J. Shleiden y T. Schwann, así como con Humboldt y Gustav Magnus. Durante esta etapa trabajó en temas como el de la constitución del tejido epitelial, describiendo los epitelios columnario y cilíndrico. Precisamentre a él se debe la explicación de la función del epitelio ciliar del instestino (1836-37).No obstante, sus trabajos se extendieron al estudio de todos los órganos y tejidos. Descubrió las fibas musculares lisas de las paredes arteriales (llamamos con el nombre de "membrana de Henle" a la capa fibroelástica subendotelial de las arterias), el esfínter externo de la vejiga, la célula hepática, los vasos quilíferos centrales, la córnea y también estableció las relaciones del hipocampo y el carácter rudimentario del lóbulo posterior de la hipófisis.

Fue nombrado profesor de anatomía en Zurich el año 1840, donde fundó con Pfeufer el Zeitschrift für rationelle Medizin, que contiene buenos estudios monográficos. Un año más tarde se publicó en Leipzig Allgemeine Anatomie, donde da a conocer sus hallazgos como microscopista y ofrece una clasificación de los tejidos. Se le considera como el primer tratado de anatomía general microscópica; según Laín, en él celebran fecundas nupcias la "anatomía general" de Bichat, por un lado, y la "teoría celular" de Schwann, por otro.

En 1844 se trasladó a Heidelberg donde ocupó una de las cátedras de su Universidad. A partir del año 1852 dirigió el Instituto de anatomía de Göttingen dedicándose de lleno a la docencia y a la investigación morfológica. En 1846 se produjo una de las principales aportaciones de Henle a la patología. Su Handbuch der rationellen Pathologie, puede considerarse junto a la obra de Rudolph H. Lotze, (Allgemeine Pathologie und Therapie) como el momento de la transformación de la patología filosófico-natural a la científico natural. En su manual Henle trata de concebir la enfermedad como un proceso material y energético que puede conocerse mediante los métodos de la ciencia natural, no muy diferentes a los procesos que constituyen la vida fisiológica normal del ser humano.

Según Laín, apoyado en la idea de causalidad de Kant, afirmó que todo nuestro saber sobre las enfermedades descansa sobre el conocimiento de su efecto: la enfermedad misma. Lo fundamental de la nosología es el concepto de movimiento, siendo la diferencia entre sano y enfermo meramente gradual. La acción patógena de una acción física o química depende sólo de su intensidad. Por tanto, creyó Henle en el carácter procesal de la enfermedad y la transición continua entre fisiología normal y la fisiología patológica.

También podemos decir que en sus obras Henle es uno de los que inaugura la orientación etiopatológica de la medicina. En su Von den Miasmen und von der miasmatishcontagiösen Krankheiten (1840) sostuvo el origen microbiano de las enfermedades infecciosas así como la especificidad de los gérmenes que las provocan.

Entre 1866 y 1871 se publicaron los tres volúmenes que constituyen su Handbuch der systematischen Anatomie des Menschen, donde da a conocer algunos de los hallazgos antes mencionados así como la descripción de la vaina interna de la ráiz del pelo (solemos hablar de "capa de Henle" para referirnos a la capa exterior de células de la vaina radicular de un folículo piloso), el desarrollo de la laringe, la sindesmología, así como el descubrimiento de 1862 de la formación renal que lleva su nombre (asa en U de un tubo urinífero). Se usa "hendidura de Henle" para referirse a los espacios de tejido conjuntivo que separan las fibras musculares cardiacas. Otro epónimo que lleva el nombre de Henle es el de "vaina de Henle", o perineurio, envoltura conjuntiva exterior al neurilema.

Según Waldeyer, se trata de "un compendio que reúne nuestros conocimientos anatómico-descriptivos en la forma más científica posible".La nomenclatura de los ejes y planos del cuerpo humano es bastante original y su método descriptivo se convirtió en modelo para los estudios morfológicos de su época y posteriores.

Henle murió en Göttingen en 1885.

José L. Fresquet. Universidad de Valencia.

Bibliografía

Laín Entralgo, P. Historia de la Medicina Moderna y contemporánea, Madrid-Barcelona, Editorial Científico-médica, 1963.

Marco Cuéllar, R. La histología y la citología, En: Pedro Laín (dir.), Historia Universal de la Medcina, Barcelona, Salvat, 1973, vol. 5, pp. 211-220.

El PRIMER DONANTE HUMANO DE ORGANOS

En 1933, el ruso Voronoy realizó el primer trasplante renal a una joven en coma urémico a partir de un hombre de 60 años. Los riñones trasplantados funcionaron precariamente durante los dos primeros días; entonces, le sobrevino la muerte a la paciente.
Voronoy comunicó en 1949 otros cinco trasplantes de riñón de cadáver conservado realizados sin éxito alguno.
El primer trasplante renal entre humanos con resultado de supervivencia del receptor tuvo lugar en Boston en 1947. A una joven en coma profundo por uremia, en anuria desde hacía diez días tras shock séptico secundario a un aborto complicado, se le trasplantó el riñón de un cadáver. El implante se practicó a nivel del pliegue del codo, y se mantenía caliente con el foco de una lámpara. El riñón secretó orina el primer día, y dejó de funcionar al segundo día. Dos días después, se reanudó la diuresis natural y se producía la curación.
En 1950 en Chicago, se realizó en EE.UU. el primer trasplante renal con implantación intraabdominal a una mujer afectada de poliquistosis renal y con función precaria a la que se le extrajo uno de sus riñones poliquísticos y se le sustituyó por el riñón de un cadáver. A los dos meses se comprobó que el riñón tenía función.
A partir de 1950, diferentes equipos europeos y americanos procedieron con el trasplante renal en humanos procedentes de cadáveres humanos.....
El primer trasplante renal con éxito absoluto
En 1954 se realizó el primer trasplante renal con éxito total al trasplantar un riñón entre gemelos univitelinos.
Durante la decada de los cincuenta se avanzó en la investigación inmunológica, siendo en 1958, en Boston, donde se realizó un trasplante utilizando dosis de inmunosupresores. El riñón sobrevivió pero la paciente murió a causa de las infecciones provocadas por la inmunosupresión...
El primer donante en muerte encefálica y a corazón latiente
En 1963, Guy Alexandre en Lovaina (Bruselas) realizó el primer trasplante renal a partir de un cadáver en situación de "muerte cerebral" y con corazón latiente. El receptor falleción un mes más tarde por una septicemia.
En 1964 realizó el segundo trasplante renal de estas características, el riñón funcionó durante más de seis años. Ese mismo año Hamburguer en París realizó el segundo trasplante renal con donante cadaver en "muerte cerebral".
Ventiséis años más tarde, el riñón trasplantado garantiza una vida completamente normal a su receptor....